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Unas notas sobre los poemas de Sempere

Irene Mira Sempere

Antes de comenzar mi agradecimiento a la Fundación Caja Mediterráneo y, especialmente, a Mamen por quien en otoño del 17 pude acceder al legado Sempere, una donación que debió realizar Abel Martín; un legado en en el que se encuentran la mayoría de los poemas de Sempere, escritos a máquina unos, otros fotocopiados, y que pude leer y conocer, pues había muchos para mí “inéditos”, que no había visto publicados en ningún catálogo o biografía…

El agradecimiento también la revista Canelobre, (Instituto Juan Gil Albert) quien me encargó escribir un artículo sobre los poemas de Sempere, por el cual he podido estudiar mas a fondo sus poemas, analizarlos, y así, poder presentarlos hoy con un mayor conocimiento de su significado y fuerza poética.

VÍNCULO POESÍA-PINTURA

Allá por el año 74 E. Eusebio comenzó a escribir poemas. Hasta ese momento, su vínculo con la poesía había sido como ”lector”, admirador, y ya había establecido puentes entre la poesía y su pintura como demuestran sus carpetas de serigrafías, las cuales han estado asociadas a poemas de distintos autores: Góngora, Gabriel Miró, los poetas árabes andalusíes para su carpeta dedicada a la Alhambra, Edmond Jabes, estuvo en contacto con el poeta mas simbolista de la generación del 27 – Vicente Aleixandre- a quien propuso colaborar en una de sus carpetas , pero quien declinó esa propuesta por temas de salud… Es decir que sus lazos con la poesía eran evidentes…hasta su última carpeta dedicada a San Juan de la Cruz…

ANÉCDOTA FAMILIAR

Allá por el año 70, nos regaló un disco de poemas de Miguel Hernández recitados por buenisimos actores de aquella época: Daniel Dicenta, Agustín González, Nuria Espert…y los escuchábamos con mucha atención y emoción…, hablábamos decidiendo quien nos gustaba mas (Agustín González), quien nos parecía que recitaba con mas fuerza, quien se implicaba en lo que decía, quien era frío y mas técnico…etc.

LA EXPERIENCIA SOBREVENIDA

A partir de ese año, el 70 mas o menos, Eusebio comenzó a sentir una pulsión irrefrenable por escribir poesía, hasta el punto de tener una libreta a mano en la mesilla de noche para poder escribir las imágenes que le venían con una intensidad que le sobrecogía y le sobrepasaba. Él mismo estaba sorprendido ante lo que le sucedía. Esos años comenzaron a ser intensamente poéticos y sus letras revelaban un mundo interno muy efervescente, atormentado, también reflexivo; un mundo de contradicciones y sufrimiento que desembocaría en su enfermedad.

CICLO VITAL

Sempere escribió poesía durante, mas o menos, sus últimos 7 años de vida activa; en el año 82, se sentó en la silla de ruedas y ya no se levantó… Durante esos 7 años vivió su momento cumbre y su declive físico ya consolidado como pintor, reconocido y valorado. En el año 80 se encontraba en una cima merecida tras muchos años de esfuerzos y sufrimientos, recibió la medalla a las BBAA, se organizó su primera exposición antológica… y justo en el 81 comenzó a tener los primeros síntomas de ELA, fue dejando de pintar progresivamente, pero aún mantuvo su creación poética mientras pudo coger un lápiz o bolígrafo.

INFLUENCIAS

En sus poemas encontramos la influencia de los poetas de la generación del 27, de la poetisa chilena Juana de Ibarburu, de Miguel Hernández y , por supuesto, del que se dice ha sido el mayor poeta de la lieratura española: San Juan de la Cruz.

Son evidentes sus tópicos poéticos: la vida-la muerte, la mezquindad del ser humano, la trascendencia, el amor…; bellamente maneja la expresión de lo contradictorio, la unión de lo opuesto, la paradoja, el oxímoron, que reflejan la lucha interior que vivía su ser, la complejidad y riqueza de su alma que le llevaba a experimentar su crisis e insatisfacción profundas de una manera sumamente creativa.

POEMAS PARA “ALIMENTANDO LLUVIAS”

SEMPERE, 18 ENERO 2019

Alzarse

Dejaré mi casa
el llanto del bebé
y la aniquilada masa.
El hedor del vertedero
seca mi garganta
y sin voz
el viento no arrastrará mi barca.
El mar no alcanza a la playa
y enfurecido
descansa.
Tanta paz es tanta guerra confluyen
opuestos que se destruyen
es la nada a quien matan.

Amo a tu alma

Me muero de amor
por ti y contigo
las pasiones son enteras
se rompen como hojas morenas.
La niña es una rosa esposa
de colores teñida
y de espinas como armas
Bayonetas
como aletas
de tiburón
tus dientes de calavera.
Quiero amar solo a tu alma
para que no me destroces, hermana.

Quiero que la aurora

Cuanta sangre Dios,
Me ahoga, me empapa
Corazones vacíos de líquido que es mañana
(deseos), adiós hermano, hermana
yo quiero salvarte
pero voy corto
(tachados) hormiga para levantarte.
Me venzo en los intentos
me olvido de tu sueño
No confiéis en la batalla
de la fuerza que está armada.
incitadores, me duelen
los cuarteles.
Defiéndete puntual
de la incitación constante.
Quédate en el umbral
del mal
y la sangre del rio será absorbida.
Pido a gritos la (una) aurora
que enamora.
Quiero el día
Sin favores
la claridad sin envidia

AUTORETRATO,

Qué delicado es Sempere
susurra la gente
en el invernadero
Por Recoletos pasea
corre
su cráneo entre las manos
en los unguis
Densa nevada
junto a un autor
Heredó el botín de un conde
mientras digiere
óxidos de hojalata
en la carretera
Espera
paciente un auto-stop
de los vehículos estremecidos
Ir alegría mecánica
mariposa y demonio
en volandas le hunden
Adios Adios

DESPUÉS

¿Qué será la muerte?
Si un instante
antes
era color
una sonrisa
y dolor
pero después
distante
veo la muerte
horizontal
zapatos de suela vertical
manos como ovillos
amarillos
sin olor
dos óvalos negros, la nariz
y el corazón
seguramente vacío
¿sí o no es morir?
No, es vivir en la tierra
sí, estar
en el hueco
de lo invisible
para multiplicarse,
Introducirse.

A TUS OJOS QUISIERA SER TECHADO

Niño
Nube en agraz
O sangrevino
Enséñame a morir
pues no he vivido
sino dentro del lento desleir
Dilúyome
Oh silbido de órgano
Estruendo de razón
Sí déjame creer
que soy tu hermano
pues lo mismo tu madre que la mía
vendían leche espesa
Espejo de tus versos
yo
Sé Juan que tu mirada robaría
Para añadírsela a mis ojos
que al instante florecen
si te veo
en arcos de arcoíris
cuando llora teresa desamor de densa queja.
Abeja
quiero libar tu miel
y déjame
del lado
de tu silencio
desahuciado
huyo de la incurable
enfermedad
Lázaro soy sin cristo que me llame
Levántame
que se me borran tus cantares
aunque no su verdad
No, no me dejes solo
en medio de la escarcha
de la falsa
geometría
no me dejes caer hacia lo oscuro
mientras tu flotas con mi mismo imán
tronchada rama de la injusticia
Juan luz
sin cruz
qué desamparo
¿por qué tu fiel mirar me ha abandonado?

Himno de varón

El agua es sangre
Un molino
corazón de varón
que tritura
la semilla de Dios.
Tanto destrozar los gritos
al empujar las aspas
con los dientes
que de repente se paran.
El Quijote
viola la tierra
con esperma de polen
para auto enterrarse.

Obsesiones

Mi madre a un lado
el cristo a la izquierda
obsesión que no me deja.
Y sin embargo
una queja
y un grito
porque se alejan.
Tan distante estoy
que convertido en punto,
me siento solo
y diminuto ambiguo
sin brillo.
¿porqué no poder a una estrella?
jamás seré astro siento que ya
he desaparecido.

Sin nombre

sin nombre voy por la calle
y mi creador
sin nombre
sin nombre
He decepcionado a mi destino
aunque ni el ni yo
esperásemos batallas
Tu peso abrumador
es injusto
sobre mi calva
mis uñas
Sé que aún soy niño
y mi cansancio de siglos
siglos
siglos

CITA

¿a mi entierro vendréis?
no me dejéis tan pronto
olvidad por un rato
la cocina e incluso vuestro amor
hasta pronto
que por última vez
vea yo en vuestros ojos
mis despojos
perecederos malolientes mustios
bajo el sol del adiós
inicial
comienza mi aventura mejor
presentida entre líneas
durante mi ignorado desvivir
aquí
os dejo
os espero
al fin
¿a mi entierro vendréis?

Poema de Eusebio Sempere recogido en el programa de Radio Clásica del 22 de marzo de 1987.

Un cigarrillo entre mis dientes
Para que la brasa queme al instante del papel la blancura
Incendio el humo, brevedad la ilusión,
Y el cuarto, vacío sin mí y conmigo

CITA

¿a mi entierro vendréis?
no me dejéis tan pronto
olvidad por un rato
la cocina e incluso vuestro amor
hasta pronto
que por última vez
vea yo en vuestros ojos
mis despojos
perecederos malolientes mustios
bajo el sol del adiós
inicial
comienza mi aventura mejor
presentida entre líneas
durante mi ignorado desvivir
aquí
os dejo
os espero
al fin
¿a mi entierro vendréis?

ASOMADO (Corregido con manuscrito)

Asomado al balcón
de mi frente veo pasar el sol
arco que se oscurece
de pena cuando lo miro.
de noche
Apago mis pupilas
pero en el espejo
queda el galope,
el sonido de la risa
padre sin hijo.
Y no hay despertar
porque la superficie se ha roto.
el brillo es
espacio de oscuridad.

DESEO MANUAL

Estoy atado
a mis manos
de huesos y sin carne
amaso la mañana con las manos
y en la tarde
son ramas de otros árboles
cortadme ya las manos
yo no quiero estas manos
podadme por las manos
y dejadme
sin estos trompos de girar
turbante

Poema de Sempere a Totte Mannes (Navidad 1981) 2ª versión

Al levantarme estoy atado
a mis manos
de huesos y sin carne

Amaso la mañana con las manos
y en la tarde
son ramas de otros árboles

Cortadme ya las manos
yo no quiero estas manos

Podadme por las manos

Y dejadme
sin estos trompos de girar
turbante

BÚSQUEDA

Porqué tú me has dejado

luz deseada

un segundo de tiempo
no es nada
para aquí dibujarte ….

1981, Navidad, versión dedicada a Totte Mannes

Por qué tú me has dejado
y te me has ido
luz deseada
si yo te buscaba
para nunca encontrarte
un segundo de tiempo
no es nada
para aquí dibujarte
te persigo con ansias de aplastarte
pero surges más viva
en esa llama
que mañana
será para mi vista de hoy cansada
hoguera inextinguible
de alborada.

Poema a Totte Mannes, Navidad 1981

ESPEJO DEL ALMA
SOY
PERO ME ACORTA EL CAMINAR
Y A OSCURAS
EN EL RINCÓN RECTANGULAR
ME DESTROZAN LAS ROSAS FERVOROSAS
LAS INOCENTES ROCAS
MAS

DESPUÉS

¿Qué será la muerte?
Si un instante
antes
era color
una sonrisa
y dolor
pero después
distante
veo la muerte
horizontal
zapatos de suela vertical
manos como ovillos
amarillos
sin olor
dos óvalos negros, la nariz
y el corazón
seguramente vacío
¿sí o no es morir?
No, es vivir en la tierra
sí, estar
en el hueco
de lo invisible
para multiplicarse,
Introducirse.

A TUS OJOS QUISIERA SER TECHADO

Niño
Nube en agraz
O sangrevino
Enséñame a morir
pues no he vivido
sino dentro del lento desleir
Dilúyome
Oh silbido de órgano
Estruendo de razón
Sí déjame creer
que soy tu hermano
pues lo mismo tu madre que la mía
vendían leche espesa
Espejo de tus versos
yo
Sé Juan que tu mirada robaría
Para añadírsela a mis ojos
que al instante florecen
si te veo
en arcos de arcoíris
cuando llora teresa desamor de densa queja.
Abeja
quiero libar tu miel
y déjame
del lado
de tu silencio
desahuciado
huyo de la incurable
enfermedad
Lázaro soy sin cristo que me llame
Levántame
que se me borran tus cantares
aunque no su verdad
No, no me dejes solo
en medio de la escarcha
de la falsa
geometría
no me dejes caer hacia lo oscuro
mientras tu flotas con mi mismo imán
tronchada rama de la injusticia
Juan luz
sin cruz
qué desamparo
¿por qué tu fiel mirar me ha abandonado?

Ricardo Forriols, Eusebio Sempere. La obra gráfica, 1965-1985. Universidad Politécnica de Valencia. Valencia, 2003, p.489

(A San Juan de la Cruz)
Niño
nube de arroz
o sangrevino
enséñame a morir
pues no he vivido
sino dentro del lento desleír
dilúyome
oh silvido de órgano
estruendo de razón
sí déjame creer
que soy tu hermano
pues lo mismo tu madre que la mía
vendían leche espesa

Espejo de tus versos
yo
sé Juan que tu mirada robaría
para añadírsela a mis ojos
que al instante florecen
si te veo
en arco de arcoiris
cuando llora
Teresa desamor de densa queja
abeja
quiero libar tu miel
y déjame
del lado
de tu silencio
desahuciado
huyo de la incurable enfermedad
lázaro soy
sin cristo que me llame
levántame
que se me borran tus cantares
aunque no su verdad
no, no me dejes solo
en medio de la escarcha
de la falsa geometría
no em dejes caer hacia lo oscuro
mientras tu flotas con mi mismo imán
tronchada rama de la injusticia
juan luz
sin cruz
qué desamparo
¿por qué tu fiel mirar me ha abandonado?

TESTAMENTO

El amor es global
hasta el último límite
No foto retocada de estío
no esfera de expansión en llamarada
¿sois hermanos?
Os dejo
a los avaros mis enjutas fibras
a los leopardos mis alados huesos
a los topos mis ojos
Este es mi testamento de inocencia
la muerte
oscuro dios
que me adjudico.

Poema recogido en Ricardo Forriols, Eusebio Sempere. La obra gráfica, 1965-1985. Universidad Politécnica de Valencia. Valencia, 2003, p.474.

Dios desamor
cuánto dolor inyectas
en mis rodillas
en mis ojos
cuando la luz de la alborada
me destroza.